¿Tu familia se agranda? 5 consejos para comprar un vehículo familiar
Es bastante normal que cuando nuestra familia va creciendo, tengamos que dejar de lado ese hermoso coche deportivo o pequeño para cubrir las necesidades de transporte. Si cuentas con varios hijos, es importante que empieces a buscar un coche de varias plazas donde todos puedan entrar cómodamente.
Hoy en día, contamos con varias facilidades para la adquisición de vehículos, no es necesario tener el monto completo del coche. Puedes solicitar un préstamo coche al banco o vender el que ya posees. En cualquier caso, comprar un coche no es tan difícil, sin embargo, es necesario tener en cuenta algunas cosas para realizar la mejor elección.
1 – Presupuesto, pero no sólo para la compra
Antes de considerar las marcas y los modelos, es necesario que tengas completamente claro cuál es el presupuesto que vas a manejar. Haz una estimación realista del valor de tu coche actual, si es que tienes uno, y luego calcula cuánto más vas a agregar a ese valor para el precio total de la compra. Si quieres obtener la mayor cantidad de dinero por tu coche, es necesario que tengas claro que, lo mejor es venderlo de forma privada.
Es importante tener en cuenta el coste anual de los impuestos de circulación, también el precio del seguro y cualquier otro coste recurrente que este pueda tener. También es importante tener en consideración el consumo de combustible del vehículo.
2 – ¿Gasolina, diésel u otra cosa?
Todas las familias utilizan sus coches de forma diferente, así que piensa en el uso que le darás al tuyo. ¿Se conducirá principalmente a baja velocidad en un entorno urbano para ir al colegio? En ese caso, es muy aconsejable evitar los coches con motor diésel, ya que no se adaptan a la conducción a baja velocidad y con poco kilometraje durante largos periodos de tiempo, lo que supone una factura de mantenimiento más elevada. En esa situación, es mejor que te quedes con un coche de gasolina modesto o, si el presupuesto lo permite, con un vehículo híbrido o eléctrico puro. Sin embargo, si tu coche familiar se utiliza también como vehículo para ir al trabajo y hacer más de 20.000 kilómetros al año en la autopista, el diésel te ayudará a reducir la factura de combustible.
3 – Asientos
El número de niños que tienes define en gran medida el tipo de coche que debes comprar. Si sólo hay un niño en la familia, las cosas no son complicadas, pero los coches urbanos pequeños no son muy buenos para el trabajo, ya que no tienen mucho espacio en el asiento trasero en el que se pueda montar un asiento para niños, y sus maleteros suelen ser demasiado pequeños para acomodar un moderno “sistema de viaje”.
De hecho, algunos utilitarios del segmento C tienen dificultades para acomodar cochecitos grandes. Una vez que tienes tres o más hijos, las opciones de vehículos cambian. Muy pocos coches normales pueden brindar comodidad y seguridad a tres niños en el asiento trasero. Esto no significa necesariamente que haya que recurrir a coches de siete plazas, ya que hay muchos monovolúmenes compactos de cinco plazas con asientos traseros amplios y separados que cumplen su función igualmente. También los SUV, aunque suelen ser más caros que un coche, en cualquier caso, un factor determinante en esto es el presupuesto que manejas.
4 – Seguridad
No escatimes en equipamiento de seguridad, tanto si compras un coche nuevo como de segunda mano. Si vas a comprar un coche nuevo, comprueba la lista de equipamiento de seguridad de serie en detalle y luego mira lo que hay en la lista de opciones, e invierte en todo lo que pueda mantener a tu familia a salvo, ya sea un sistema activo que ayude a prevenir colisiones en primer lugar, o medidas que ayuden a proteger a los ocupantes del coche en caso de choque. También merece la pena visitar el sitio web de Euro NCAP para comprobar la calificación de seguridad de cualquier marca y modelo que estés pensando en comprar.
5 – Finanzas
Cuando hagas tus cuentas, es el momento de considerar cómo vas a financiar el coche. Pocos ahorran una suma global de dinero en efectivo. Los préstamos bancarios siguen siendo populares, pero cuando se trata de coches nuevos, la financiación PCP está ganando mucho terreno.
Se trata de una forma de alquiler con opción a compra en la que se paga un depósito, luego sumas mensuales fijas durante un periodo acordado y, al final del acuerdo, se paga una suma global para poseer el coche, se devuelve el coche o se utiliza el capital restante en el coche para pasar a un nuevo coche en otro PCP.
Deja una respuesta